La mayor riqueza del hombre no es material, ni la diligencia, ni la posesión de cualquiera de las virtudes, pero la mayor riqueza es el auto-análisis, el análisis, el refinamiento y el pensamiento. Aprende a dejar que el mundo se detenga, haz una pausa, piensa en ti mismo, recuerda, cuando pienses, no mueras ciclo de enredo de una cosa, un pensamiento, atascado en un callejón sin salida.
¡Vacío!